ES-8
Antes de la tala es importante planear el camino de
retirada y en caso necesario liberarlo de antemano. El
camino de retirada debería llevar para atrás en sentido
diagonal de la línea estimada de la caída del árbol, como
se muestra en la Figura N° 9.
Antes de la tala es necesario considerar la inclinación
del tronco, la localización de las ramas más grandes
y la dirección y la fuerza del viento para que se pueda
determinar el sentido de la caída del árbol.
Hay que eliminar la suciedad del árbol, piedras, corteza
suelta, clavos, grapas y restos de cables.
b) Ejecución del corte de dirección
En ángulo recto con el sentido de la caída y del lado de
la caída se realiza un corte cuya profundidad debe ser de
aproximadamente 1/3 del diámetro del tronco, como se
muestra en la fi gura n° 10. Primero, efectuamos el corte
inferior horizontal. Esto evita que la barra con la cadena
se estreche al realizar el segundo corte superior
.
c) Ejecución del corte f nal de la tala
El corte fi nal se realiza por lo menos 50 mm por encima
de la muesca horizontal, como se muestra en la fi gura
n° 10. El corte fi nal se hace en paralelo con la muesca
horizontal y se corta solo hasta la carne que formará una
especie de bisagra que dirige al árbol en toda la caída
hasta llegar al suelo sirviendo de suspensión articulada.
La bisagra impide que el tronco se gire y se caiga en
la dirección equivocada. No corte la bisagra (carne del
árbol).
Cuando el corte fi nal se acerque de la bisagra, el árbol
debería comenzar a caerse. Si en ese momento ve que
el árbol pueda caer en la dirección no deseada, o se
incline hacia atrás agarrando la hoja de sierra, debe
detener la ejecución del corte fi nal y desviar el tronco
hacia la dirección deseada, utilizando trozos de madera,
plástico o aluminio.
En cuanto árbol comience a caer, hay que sacar la sierra
de cadena, apagarla, poner al suelo y salir de la zona
de peligro por el camino de retirada planeado. Cuidado
con las ramas caídas y otros obstáculos en el terreno y
la posibilidad de tropezar durante la retirada precipitada.
d) Ramif cación
Por el término ramifi cación se entiende la separación
de las ramas del tronco caído. Al principio dejamos las
ramas más grandes, orientadas hacia abajo, porque
sujetan el tronco. Las ramas más pequeñas, de acuerdo
a la Figura 11, las separamos de un solo corte. Las ra-
mas mecánicamente estiradas se deben cortar de abajo
hacia arriba para evitar que la hoja de sierra se agarre.
e) Recorte del tronco
Por el recorte del tronco se entiende el corte de un
tronco ya caído en partes / tajos. Al cortar, mantenga
una postura fi rme y segura y una distribución uniforme
del peso del cuerpo sobre ambos pies. Si es posible, el
tronco debería estar apoyado por las ramas o cuñas y
protegido contra el movimiento. Siga las instrucciones
simples para facilitar el corte.
Si el tronco está tumbado en el suelo de manera unifor-
me en toda su longitud, como se muestra en la Figura
12, cortamos desde arriba.
Si el tronco del árbol caído está tumbado en el suelo solo
por un lado, como se muestra en la Figura 13, cortamos
primero desde abajo hasta la profundidad de aproxima-
damente 1/3 del diámetro del tronco y luego acabamos
el corte desde arriba contra el corte inferior.
Si el árbol está tocando el suelo en ambos extremos,
como se muestra en la Figura 14, cortamos primero
desde arriba hasta la profundidad de aproximadamente
1/3 del diámetro del tronco y luego acabamos el corte
de los restantes 2/3 desde abajo contra el corte superior.
Cuando se corta en la pendiente, hay que estar siempre
por encima del tronco, como se muestra en la Figura
N°15. Para tener un control total sobre la sierra, incluso
cuando “se termina el corte”, reducimos al fi nal del corte
la presión sobre la sierra, sin afl ojar la sujeción fi rme
de los agarradores. Hay que prestar atención a que
la cadena de la sierra no toque el suelo. Después de
completar el corte, esperamos hasta que la cadena de
la sierra se pare por completo, y luego la guardamos. Al
pasar de un árbol a otro, siempre apague el motor de la
sierra de cadena.
6. Mantenimiento y limpieza
Desenchufe la máquina de la corriente antes
de comenzar con cualquier trabajo de manteni-
miento y de limpieza.
• Después de terminar el trabajo con la sierra de cadena
limpie cada vez las virutas y el aceite
con un trapo.
Para proteger el interior del aparato de la suciedad,
éste dispone de un fi ltro (19) en la zona de aspiración
que sirve para la refrigeración del motor. Éste está
conformado de forma que, en condiciones normales
basta una limpieza mediante un simple cepillado des-
de el exterior. Si se acumula mucho polvo, el fi ltro pue-
de desmontarse y limpiarse por fuera (p. ej. mediante
soplado). Para ello se suelta la tapa del fi ltro (20) del
cierre manipulando con un destornillador en el punto
señalado (Fig. 16) y ya se puede extraer el fi ltro.
• En caso de una contaminación grande de la cadena
respectivamente en caso de resinifi cación, la cadena
debe ser desmontada y limpiada. Con tal objeto, poner
la cadena en un recipiente con purifi cador de cadena
y dejarla allí unas horas. Después, lavar la cadena con
agua limpia y - si no tiene Ud. la intención de reutilizar
la cadena inmediatamente - tratarla con Service Spray
o con otro spray anticorrosivo de uso corriente.
• Sólo en caso del uso de aceite de cadena biológico:
Como unos tipos de aceite biológico tienen la tenden-
cia de incrustarse después de un cierto tiempo, es ne-
cesario limpiar el sistema de aceite antes de un tiempo
de no utilización prolongado de la sierra. Por ello, llenar
el depósito vacío hasta la medida (aproximadamente
50 ml) con purifi cador de cadena y cerrarlo según
costumbre. Después, accionar la sierra sin espada y
cadena montadas hasta que todo el líquido de purifi ca-
ción haya salido de la abertura de aceite de la sierra.
Antes de utilizar la sierra de nuevo, es absolutamente
necesario rellenar el depósito con aceite.
• No guarde la sierra al aire libre o en habitaciones
húmedas.