ESPAÑOL
Utilizar este cepillo para todas las superficies lavables amplias.
Para limpiar los pavimentos, colocar el cepillo sobre un paño seco y lim-
pio y pasarlo adelante y atrás sin apretar. Cuando un lado esté sucio, girar
el paño. La presión vapor deberá ser regulada al máximo.
Usar el cepillo sin paño sobre las zonas sucias o incrustadas, y sobre las
juntas de las baldosas con movimiento lateral para quitar la suciedad. Para
esquinas difíciles y manchas, utilizar directamente la empuñadura; pasar
posteriormente el paño sobre los puntos así tratados.
Sobre las superficies verticales lavables o papeles pintados y sobre techos,
recubrir el cepillo con un paño de algodón seco y proceder con el vapor
al mínimo de presión. Es aconsejable envolver el cepillo con un paño a
ser posible esponjoso (toallas de baño viejas).
Para limpiar las superficies acristaladas, regular la presión en valores
medios, envolver el cepillo con un paño de algodón que no deje pelo, fijar-
lo con los enganches de las pinzas (18), pasar sobre los cristales para
desengrasarlos o para eliminar todo rastro de productos detergentes. Ter-
minar vaporizando con la pistola y secando la superficie. En estaciones
con temperaturas excesivamente frías precalentar los cristales mantenien-
do la empuñadura a 50 cm. de la superficie antes de proceder a la lim-
pieza.
Sobre todo tipo de moquetas sintéticas o de lana, tanto de pavimento como
de pared, como también sobre cualquier alfombra, el VAPORETTO LEA-
DER asegura la máxima higiene y restituye el aspecto original reavivan-
do los colores. El tratamiento puede ser repetido a voluntad sin peligro
para las superficies. El secado es prácticamente inmediato. Pasar sobre
la superficie el cepillo sin paño para hacer subir la suciedad a la superfi-
cie.
Posteriormente recubrir el cepillo con un paño de algodón bloqueándolo
con los enganches de las pinzas (18).
Según la delicadeza de las moquetas, dar más o menos vapor.
Proceder rápidamente y sin apretar sobre las moquetas llevando el
cepillo adelante, atrás y lateralmente sin pararse demasiado tiempo en el
mismo punto. En caso de moquetas muy sucias o saturadas de productos
detergentes no insistir demasiado, los resultados serán evidentes después
de algunas utilizaciones del VAPORETTO LEADER.
Para limpiar las manchas persistentes, antes de proceder al tratamiento
anteriormente indicado, tratar directamente la mancha con la empuñadura
vaporizadora (a distancia de 5 o 10 cm.) y pasar un paño enérgicamente.