© & ™ Lucasfilm Ltd.
© & ™ Lucasfilm Ltd.
El tamaño no importa
A pesar de su humilde tamaño, Erredós es un
compañero de incalculable valor, ingenioso y leal
a los amos a los que sirve. Desde el principio, es
evidente que tiene su propia forma de pensar.
Con frecuencia, la gente lo subestima por sus
reducidas dimensiones, pero eso es precisamente
lo que le permite pasar desapercibido, retrasar al
enemigo, reparar un caza estelar en pleno vuelo,
apagar incendios (o provocarlos) y rescatar a sus
amigos una y otra vez.
Una amistad insólita
Aunque se limita a hablar con zumbidos, silbidos y
chirridos, R2-D2 sabe cómo hacer que se conozca
su opinión. Inclinando su pequeño cuerpo,
dando enérgicos pisotones o giros, o alterando
el volumen y el tono de su voz, logra transmitir
siempre lo esencial de su mensaje. Cuando tiene
que comunicar información más compleja, el
droide de etiqueta y protocolo C-3PO, su amigo
de toda la vida, traduce su código al idioma
humano necesario. C-3PO no siempre entiende
lo que significan esos mensajes y jamás pierde la
oportunidad de discutir con R2-D2, pero ambos
comparten un genuino vínculo afectivo y la
obligación de ayudar a sus amigos humanos a
acabar con el lado oscuro.
6